Javier Garanto Satué (Huesca, 1981) Estudió varios ciclos en la Escuela de Arte de Huesca y trabaja alrededor del arte urbano desde el año 2010. Ha participado en festivales referentes de este ámbito como Pinta Malasaña, Calle Lavapies, Cultura Inquieta de Getafe, festival Asalto de Zaragoza o CREA Alcobendas en el que en el año 2022 obtuvo el primer premio del jurado.
En 2009 Gana el segundo premio de cómic de la muestra de Arte Joven de Gobierno de Aragón y en 2010, ganaría un accésit en la misma categoría.
En los siguientes 10 años se forma en varias escuelas, expone en varias exposiciones colectivas y profundiza en su manera de pintar. La obra de Javier Garanto siempre ha sido una continua expresión de su situación personal y su percepción de la sociedad en la que vive.
En 2018, se marcha a vivir a Ciudad de México. Allí no conoce a nadie. Eso le ayuda a ver la ciudad como un migrante y encuentra su cara más callejera. Un paso definitivo para la lectura actual de su obra. Durante la pandemia trabajará en un proyecto titulado “New normality” en la que colgó más de 50 obras en gran formato por las calles de Ciudad de México. Javier explicaba este proyecto de esta manera así: «Entre el caos que nos rodea, somos millones de personas haciendo lo mismo, compartiendo acción, tiempo y espacio. Parece que vivimos la misma vida, hasta que al mirar con detenimiento, cada uno está viviendo su propia vida y sus circunstancias son completamente diferentes. Este proyecto supuso un impasse en su carrera, en la que tuvo claro que quería poder ayudar en ese momento a las personas para que cuando salieran a la calle en ese momento pudieran tener un respiro de la situación que estaban viviendo.
Después de tener varias exposiciones colectivas, en enero de 2022 tuvo su primera exposición individual en “La Carbonería Espacio de Arte” con el título “Pequeño catálogo de seres https://lacarboneria.net/arte/nuevo-pequeno-catalogo-de-seres/ En esta serie presentó unas 12 obras de gran formato jugando con composiciones que trabajan como fotografías instantáneas de cómo interaccionan las personas con distintos animales o criaturas imaginarias. Eran pequeños cuentos en distintos escenarios como bosques, ciudades o planetas lejanos, y como en todos ellos podemos encontrar seres llenos de luz que nos ayudan a tener una visión más positiva de la vida a través del amor.
En febrero presentó en la feria “Hybrid” de Madrid (feria paralela a Arco), su último proyecto titulado “Sizigia”, obras pintadas en acrílico sobre cristal, en las que se puede ver como diferentes capas se superponen y a su vez crean nuevas formas. Utilizando el símil de la palabra “sizigia”, para alinear momentos o experiencias vitales como si de objetos celestes se trataran, y así como estas crean nuevas luces o experiencias conjuntas.
Su mundo imaginario se presenta en forma de personajes, una especie de cronopios, que nos trasladan su momento vital más personal en cada una de sus etapas. Y en conjunto y como artista de su tiempo, nos comparte su percepción de esta sociedad en la que vivimos: alocada, impersonal, individualista…