No necesita títulos en su obra. Sus modelos imaginarias nos trasladan a un mundo sutil de atmósferas ingrávidas que nos dan libertad de ver lo que más nos gusta. Un eterno romanticismo bucólico nos abre una puerta a la imaginación sin ningún condicionante. Dominio técnico rompiendo tópicos y experimentando con gamas cromáticas generosas dan un equilibrio y serenidad poco usual a una obra en la que el retrato tiene un protagonismo que se funde en la magia de un entorno magistralmente trabajado.
Visítala hasta el día 6 de octubre 2022.